Un muerto y dos chicos heridos tras una balacera en un pasillo

La víctima fatal tenía 26 años y era el blanco de los agresores. Pero además le dieron a un chico de 18 y a un nene de 11, que está grave.

Ayacucho al 4200. El violento hecho ocurrió el domingo alrededor de las 20.

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Por Eduardo Caniglia / La Capital 

El domingo a la noche un hombre se metió en un angosto pasillo bordeado por modestas casas de material de un sector del barrio Tablada y desató una tremenda balacera. Muchos de los disparos impactaron en el cuerpo de Eugenio Solano, un muchacho de 26 años que minutos después falleció camino al Hospital Roque Sáenz Peña.

Pero la lluvia de proyectiles también alcanzó a dos hermanos de 18 y 11 años que estaban comprando en un quiosco y no eran los destinatarios de la agresión. El menor de ellos, Julián Alvarez, continuaba al cierre de esta edición internado en terapia intensiva del Hospital de Niños luego de que dos balas le atravesaran el pecho y perforaran el abdomen, motivo por el cual ayer lo operaron dos veces. El mayor, Mauricio Romero, fue alcanzado por dos proyectiles en el abdomen y anoche seguía internado en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca). Según dijeron sus familiares, su vida no corre peligro.

Luego del brutal ataque fue demorado en una casa de Ayacucho al 4300 un joven de 20 años bajo la sospecha de haber sido el autor de la balacera pero, según una fuente judicial, no existen evidencias para atribuirle el hecho por lo cual luego fue liberado.

"Este es un incidente entre grupos que viven en la zona. La policía se llevó demorado a un joven en resguardo de su propia integridad porque los vecinos lo señalaban como integrante del grupo agresor sin más elementos", sostuvo un vocero de la Fiscalía de Homicidios, y agregó que entre las hipótesis del caso el móvil pudo haber sido un homicidio ocurrido hace un mes y medio.

Quiosco. En la barriada Eugenio Julio Solano era conocido como "Popy". Tenía 26 años y vivía en una casa del pasaje Esperanto, una arteria de una cuadra a la altura de Ayacucho al 4200, situada a unos 50 metros de donde ocurrió el trágico hecho.

Eran cerca de las 20 del domingo y Julián estaba comprando algo en un pequeño quiosco del asentamiento acompañado de su hermano Mauricio. En el comercio, atestado de gente porque era el único de la zona que está abierto los domingos, también se encontraba Solano.

Todo transcurría con normalidad hasta que apareció en escena un hombre sosteniendo, según algunos vecinos, una ametralladora en una de sus manos. "Un pibe pasó por el pasillo y empezó a tirar sin decir nada. No sé si me metió por Garibaldi o Colón porque hay varias entradas y salidas", explicó Silvia, una hermana de Julián y Mauricio. La chica estaba con su familia en una vivienda ubicada a pocos metros del quiosco.

Apenas llegó el atacante se paró sobre un improvisado desagüe con agua servida tapado con una chapa y abrió fuego. Solari estaba a un metro de distancia y le disparó a quemarropa. La ráfaga de tiros le atravesó la cabeza y le perforó el cráneo, cuello, abdomen y tórax. Popy se desplomó agonizante en el suelo y un rato después un patrullero lo llevó hasta el Sáenz Peña, pero su vida se apagó en el camino.

Pasillo. Las estampidas alertaron a los familiares de Julián y Mauricio. "Salimos y vimos al muerto tirado en el piso. Como estábamos desesperados sólo atinamos a rescatar a mi hermanito y a mi otro hermano", comentó un joven llamado Diego.

Los parientes de los chicos los subieron a un auto y los llevaron hasta el Heca. Julián fue operado en ese centro asistencial y luego derivado al Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde fue intervenido nuevamente.

Ayer a la mañana varios hombres, mujeres y muchachos se habían arremolinado en el pasillo donde ocurrió el violento suceso. Silvia comentaba, por ejemplo, que siempre realizan las compras en el quiosco del pasillo para no salir a la calle por una "cuestión de seguridad, pero igual nos pasó esto".

Todos los días. "Acá no se puede vivir más. Todos los días pasan cosas como esta. A mí y a mi hija nos balearon el año pasado", se lamentó una muchacha treintañera. Todos los vecinos coincidieron en un reclamo. La apertura como calle de ese sendero que es la continuación de Ameghino. "Nos prometieron que lo iban a hacer el año pasado, pero no lo hicieron. Abrieron la calle Centeno. Por eso queremos que la intendenta cumpla con la promesa", afirmó otra mujer.

Los vecinos se referían al plan Abre. El 8 de mayo pasado, el ex gobernador Antonio Bonfatti encabezó el acto de apertura de la licitación para la realización de las obras para reconvertir la zona denominada "Cordón Ayacucho", en el barrio Tablada. El plan incluía abrir seis arterias en el asentamiento, agua potable, cloacas, energía eléctrica y la construcción de 254 viviendas para relocalizar a las familias asentadas sobre esas trazas.

Pedido urgente

Julián Alvarez, el chico de 11 años baleado en Ayacucho y Ameghino, estaba al cierre de esta edición internado en grave estado en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela. Desde ese centro asistencial sus familiares solicitaron en forma urgente dadores de sangre 0 negativo, que deberán presentarse hoy de 8 a 10 en el banco de sangre del efector.