Delfín Zacarías tenía sueños y tierra

Delfín Zacarías tenía sueños y tierra

Gendarmería Nacional allanó oficinas de Tierra de Sueños en la búsqueda de documentación sobre las inversiones inmobiliarias que había hecho el narco que está detenido desde el 5 de octubre.

La justicia Federal de Rosario ordenó a Gendarmería Nacional inspeccionar las oficinas de Tierra de Sueños, ubicadas en San Lorenzo y Corrientes, para buscar documentación sobre las inversiones que hizo en uno de los emprendimientos urbanos ubicados en Roldán Delfín David Zacarías, detenido desde el 5 de setiembre, cuando lo detuvieron en una casa en Funes, donde tenía un laboratorio de cocaína.

Según informaron fuentes judiciales a Cruz del Sur, efectivos de la Gendarmería Nacional fueron a buscar tres boletos de compra-venta y otro tipo de documentación a las oficinas de Tierra de Sueños. Zacarías había adquirido tres terrenos en Tierra de Sueños III durante 2009. Dos propiedades, que estaban a nombre de su hija Leilen, ya las había vendido. 

Los efectivos también se hicieron presentes en una inmobiliaria Estrella Brokers Inmobiliarios, en Córdoba 1437, donde los gendarmes se llevaron documentación de otras propiedades que pertenecerían al líder de la organización delictiva. Se sospecha que Zacarías participó de un fideicomiso de una obra de construcción. 

El juez Carlos Vera Barros investiga los bienes que Zacarías podría haber comprado con dinero  del narcotráfico. Cuando lo procesó el 10 de octubre pasado ordenó su prisión preventiva y lo imputó de “tenencia de elementos y materias primas para producir y fabricar estupefacientes” y por “administración y disimulación de bienes provenientes de las ganancias recibidas por el tráfico de drogas”. 

Los bienes 

Zacarías había hecho todo lo posible para no pasar desapercibido con los bienes y las compras que hacía con el dinero que provenía de la venta de estupefacientes, que era mucho. Hace un par de años empezó a construir una mansión frente al río, en San Lorenzo, donde residía con su familia, y un megagimnasio, cuyo primer proyecto que presentó el Concejo Deliberante en 2011 preveía la edificación de más de 6500 metros cuadrados. El lugar que eligió también llamó la atención: una zona semirural, sin mucho sentido comercial en la que se iba a destacar con mucha intensidad el edificio de seis pisos. Y fue por cierta fanfarronería que su estilo de vida desbordado empezó a disparar sospechas. Como esas construcciones infringían el código urbano de esa ciudad, el Concejo Deliberante le dio una excepción para que pudiera edificar. A cambio, Zacarías prometió “apadrinar” la construcción y mantenimiento de una plaza y financiar el alumbrado público de nueve cuadras, con cordón cuneta incluido. Prometió además que iba a hacer las gestiones para que en el predio se instalara un local de McDonalds y una cadena de cines. A los vecinos les gustó la idea.

En octubre de 2012 un ex funcionario de la Municipalidad de San Lorenzo lo denunció ante la Unidad Regional de San Lorenzo y en el Ministerio de Seguridad. Ya había purgado una condena por narcotráfico en 2005, que lo llevó a residir en el penal de Coronda y en la Unidad III de Rosario, donde participó de un taller literario y publicó un libro de poemas. “Hoy el resplandor enciende/ mi espíritu amputado/despertando abruptamente de esa pesadilla/que como araña venenosa me envolvía/y me expulsaba del paraíso,/llevándome con Judas al peor de los infiernos”, escribió el acusado de tráfico de estupefacientes.

Infierno encantador

La poesía de Zacarías parece haber sido premonitoria. Porque volvió al “peor de los infiernos”, luego del allanamiento en el chalet de Las Achiras 2528, en Funes, donde los efectivos de la Federal se llevaron más de 300 kilos de pasta base y cocaína, precursores químicos e instrumental para fabricar la droga a gran escala, como centrifugadores y secadores con lámparas muy potentes.

A partir de la denuncia de un particular se empezaron a activar áreas del Estado para observar el desorbitado comportamiento que este hombre de 48 años tenía con el dinero. Desde el 29 de mayo pasado, la Justicia federal tenía en su poder una investigación sobre el crecimiento económico indiscriminado de Zacarías, que realizó la Subsecretaría de Delitos Económicos de la provincia, al mando de Margarita Zabalza. Esta dependencia, que se creó luego de que fuera preso el ex jefe de la Policía Hugo Tognoli, hizo una investigación centrada en las propiedades y vehículos que había adquirido Delfín desde 2008 en San Lorenzo.

Zacarías posee, según la información relevada por la Secretaría de Delitos Complejos, 68 bienes registrables, de los cuales 40 son inmuebles. Cuando los funcionarios del área que encabeza Zabalza empezaron a “peinar” la información referida a este hombre se toparon con que 36 propiedades fueron adquiridas en un breve lapso, entre el 29 de diciembre de 2008 y el 23 de ese mes de 2009. Aparte de los inmuebles, Delfín se preocupó por adquirir vehículos, entre ellos algunos de alta gama. Este hombre tiene 24 vehículos en total. Nueve son modelo 2011, y seis de estos autos tienen una particularidad, son Chevrolet Meriva GL 1.8, con los dominios consecutivos, por lo que se deduce que fueron comprados el mismo día. Además, esta persona figura como titular de dos autos de alta gama, un BMW 2011 y un Audi TT 2012, y dos motocicletas del alto valor, como son las de marca BMW, 2011 y 2012.

El entorno

Se constató, según la denuncia del Ministerio de Seguridad provincial, “la existencia de los inmuebles mencionados” por este ex funcionario municipal, que “eran propiedad de la hija de Zacarías y que uno de los terrenos sería propiedad en partes iguales de esta mujer y de un joven de 28 años, que habría sido empleado de la hija de Delfín hasta el mes de junio de 2012, cuando pasó a ser empleado de la firma Top Cranes SRL, que es propiedad de esta joven y su padre. La hija de Zacarías, de 24 años, adquirió ocho propiedades entre mayo y julio de 2009. Después sumó otros cuatro inmuebles, cinco autos y un camión. El muchacho de 28 años que figuró como empleado de la hija de Delfín hasta junio de 2012 posee cuatro inmuebles en condominio con su antigua jefa. Hay un sujeto que es empleado de la esposa de Zacarías y luego de la firma Frecuencia Urbana que figura como titular de cinco autos y dos inmuebles adquiridos en enero de 2008. Este hombre no tiene actividad declarada en Afip.

En la investigación, también se puso bajo la lupa a otros actores del entorno familiar, como la hermana de Zacarías, quien no registra actividad declarada en la Afip pero figura como titular de 13 inmuebles (todas cocheras), que fueron adquiridos en bloque el 29 de diciembre de 2008. La pareja de esta mujer que aparece en los registros como empleado en relación de dependencia posee otros doce inmuebles (también cocheras), que fueron adquiridos el mismo día en que lo hizo su esposa.

Ante la inconsistencia legal de ese crecimiento económico, el Ministerio de Seguridad provincial presentó una denuncia formal el 29 de mayo pasado en la fiscalía federal Nº3, a cargo de Mario Gambacorta. Por lo que señalaron fuentes de la Justicia Federal a Mirador Provincial, a la par de la pesquisa económica, se había iniciado otra por narcotráfico. Incluso, el fiscal subrogante Juan Patricio Murray consideró que la información revelada por el Ministerio de Seguridad provincial, que publicó en exclusiva el diario El Litoral, hizo peligrar la investigación sobre el laboratorio clandestino que Zacarías poseía en Funes. En los tribunales federales se encargaron de remarcar que la investigación comenzó hace seis meses en el barrio La Cerámica, donde un hombre disparó con una ametralladora contra un búnker. Allí resultó herida una niña de 13 años que estaba sentada en la puerta de su casa. Ante lo ocurrido, los vecinos del barrio se juntaron y prendieron fuego el quiosco de drogas.

"Esta investigación la iniciamos en marzo pasado con el Fiscal Federal, Patricio Murray, y con el personal de la superintendencia de Drogas Peligrosas, a raíz del desprendimiento de otra investigación menor por venta de droga en Rosario", explicó el secretario de Seguridad de la Nación Sergio Berni, quien agregó: "Estábamos convencidos que había que investigar porque sabíamos que acá en Rosario existía una gran producción y transformación de cocaína en pasta base para su posterior comercialización".  "Tenemos detenida a la banda completa, la que creemos, era el corazón sobre la cual giraba el problema del narcotráfico en Rosario", sostuvo y aclaró que "no es frecuente" que una misma organización "centralice todo en un solo lugar".