“NO SOY OFICIALISTA, Y NO ME GUSTA ESA PALABRA”

Es uno de los mejores actores argentinos, su nombre está vinculado a grandes títulos de cine, teatro y televisión. En una entrevista exclusiva con Revista ADN habla de la especial relación que lo une a Rosario, de su exitosa trayectoria, de sus comienzos y de su postura con respecto al gobierno nacional.

Darío Grandinetti no necesita presentación, su nombre es sinónimo de excelencia y profesionalismo.

Actualmente está protagonizando la obra de teatro Baraka junto a Jorge Marrale, Juan Leyrado y Hugo Arana que se presentó en Rosario con un gran éxito.

 El año pasado incursionó en radio, en LT3 AM 680, con un programa muy personal. El actor se confiesa en este reportaje exclusivo para Revista ADN.

La búsqueda

¿Cuándo decidiste que ibas a ser actor?

Fue en Rosario, al poco tiempo de empezar a tomar clases con Héctor Barreiros. Me dí cuenta de que me gustaba más que jugar al fútbol, que es lo que quería. Supongo que descubrí que se me prestaba atención que era lo que estaba buscando.

¿Y cómo fue tu llegada a Buenos Aires?

Al principio todo era mas fácil porque venia a trabajar, me ganaba la vida de la manera que quería, y todo eso ayuda a palear la nostalgia. Pero cada vez que podía me volvía a Rosario. No fue fácil, una gran ciudad para alguien del interior no es fácil. Yo nunca recibí discriminación, al contrario, pero no necesitaba eso para extrañar, extrañaba yo por lo que a mi me gusta. Tener y poder disponer del tiempo en una ciudad grande es más complicado.

¿Qué significa para vos Rosario?

Desde hace un tiempo es especial para mí ir a Rosario, por cualquier cosa, por motivos personales, porque siempre he ido, últimamente estoy yendo más. Es como que necesito más estar en Rosario, será que estoy más viejo. Me hace cada vez mejor ir.

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