Rosario joven

Un noche en la ciudad

Las mujeres más lindas, una flamante red de hostels y bares a toda hora atraen cada vez más estudiantes. También, claro, hay opciones para disfrutar del día.
Si una creencia nada empírica se encarga de recalcar que las mujeres más lindas del mundo están en la Argentina, Rosario se hace cargo de ser el epicentro de esa belleza. Y no son pocos los grupos de varones que se escapan de viernes a domingo, o aprovechan los fines de semana largos para instalarse en la cuna de la Bandera. Pero lejos está de ser su único atractivo...

Basta con pasear por la peatonal para descubrir que las rosarinas son hermosas. ¿Son las más lindas? Tal vez sea una cuestión de gustos y experiencias personales, aunque bien puede ser una excusa para visitar la ciudad.

Juan Nyffenegger, presidente del Ente Turístico de Rosario (ETUR), aporta: "El boca en boca es fundamental. Hay un evidente crecimiento del turismo juvenil porque la ciudad dispone de muchas propuestas para este segmento. Cuenta con 70.000 estudiantes y durante los fines de semana hay una constante ocupacional. En cuatro años pasamos de no tener ningún hostel a los 18 habilitados actualmente".

Entre los universitarios, una importante mayoría son mujeres de distintas ciudades de Santa Fe y Entre Ríos. "La mayoría de nuestros hospedajes están ocupados por chicas del interior", dice Luciana, responsable de una serie de apart hoteles y departamentos de alquiler temporal.

Javier, un estudiante de Ingeniería Industrial, de 26 años, que va por su tercera visita a la ciudad, apoya la hipótesis sobre la mayoría de chicas: "Por cada hombre debe haber cinco mujeres". Un censo a simple vista en la puerta de cualquier boliche o pub de la ciudad, si no le da la razón, lejos está de refutar su teoría.

En el inmenso complejo bailable Madame, una antigua fábrica reciclada que despunta desde las alturas un silo cilíndrico, la interminable cola de señoritas se pierde por la calle Francia en dirección al río Paraná. Perpendicularmente, una sola cuadra enfila la espera de los hombres.

"¡Viste lo que era la entrada de mujeres! En La Plata no hay ningún boliche así", comenta entre exaltación y ansiedad un hincha de Gimnasia y Esgrima antes de derivar la charla a una discusión tan masculina como federal entre simpatizantes de clubes de fútbol bonaerenses, cordobeses, platenses, santafecinos y rosarinos.

Adentro, las pistas son enormes y cuesta trasladarse por el que, posiblemente, sea el boliche más grande del país.

Con vista al río
Mientras en enero el cálculo del ETUR señaló un incremento del 20% respecto del mismo mes en 2007 (que, a su vez, fue un 35% mayor que el año anterior), la Secretaría de Servicios Públicos está trabajando en un plan para liberar de tránsito vehicular la zona del microcentro, la cual dispone de dos calles peatonales.

"Está creciendo también la cantidad de visitantes extranjeros, integrándose así al fenómeno turístico del país. Actualmente, estamos en un proceso de inversión en hotelería", comenta Nyffenegger.

Además de una gran cantidad de propuestas culturales, históricas y al aire libre, Rosario cuenta también con paseos diseñados especialmente para niños: desde granjas y parques lúdicos hasta museos. Por su parte, su destacada infraestructura permite la organización de todo tipo de eventos, congresos y exposiciones, además de personal especializado tanto desde el punto de vista empresarial como educativo y científico.

Desde el anochecer, el imponente Monumento a la Bandera, con sus luces blancas y celestes, regala desde su fluorescencia otra postal de llamativa belleza.

También es un paso obligado para llegar a los boliches que están a orillas del río. Los rosarinos no dudan en recomendar Taura, un club náutico que durante las noches de primavera, verano y hasta entrado el otoño se transforma en lugar bailable. Entre veleros que descansan y varias carpas con distintas propuestas musicales se intercambian las sonrisas santafecinas con la gracia cordobesa y el chamuyo porteño. "Me encanta cómo hablan los de Buenos Aires", comenta Eliana, una estudiante de Psicología con un paisaje azul en los ojos.

Playas, música y deporte
Mientras los días de calor lo permiten, las playas sobre el río Paraná son otro de los atractivos de los que dispone Rosario para visitantes y residentes. Hacia el Norte, unos kilómetros antes de llegar al puente Victoria, que conecta la localidad santafecina con Entre Ríos, se encuentran los balnearios de La Florida. Allí el ambiente suele ser familiar, toda una continuación de la serenidad con la que se puede disfrutar el parque España en toda su languidez.

Al disminuir la actividad de los ferrocarriles se logró este gran corredor de parques y accesos libres al río. El año próximo se sumará el proyecto Puerto Norte, iniciándose desde el Museo de Arte Moderno para aprovechar las instalaciones de una antigua refinería", dice el presidente de ETUR.

Para la juventud, la propuesta más atractiva está en la isla que enfrenta la ciudad. Desde el mediodía, una larga cola en la Estación Fluvial va llenando cada media hora los catamaranes que cruzan a las playas Deja Vu, Vladimir y Willie Dixon. Estos balnearios disponen de canchas de beach-volley, fútbol, tenis, paradores con bares, música y recitales para acompañar los atardeceres.

Mientras los cordobeses son fácilmente distinguibles por sus heladeras portátiles con Coca-Cola y Fernet, los porteños casi no se dan descanso a la hora de buscar chicas.

Con la oscuridad adueñándose de la isla y filas largas esperando el transporte de regreso, esta orilla regala una vista sensacional de la metrópoli rosarina: cada vez más grande, y cada vez más bella.


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