Ejecutaron a un muchacho en Felipe Moré y Ocampo, en el barrio Villa Urquiza, el domingo al anochecer. El agresor le disparó desde corta distancia con un arma 11.25 y escapó. Se presume un acto de venganza.
El domingo mientras se iba haciendo de noche, una escena conmovedora rompió la rutina del barrio Villa Urquiza: una joven lloraba clamando por ayuda abrazada a su hermano, un muchacho de 23 años que agonizaba en la calle luego de haber sido herido de dos balazos. Quien le había disparado los dos tiros mortales ya se había esfumado y varios vecinos se habían arremolinado para auxiliar a la víctima. Finalmente, todos los esfuerzos para salvarle la vida fueron vanos: la vida de Lucas Ezequiel Escalda se apagó en escasos minutos cuando una ambulancia del Sies lo llevaba hasta el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez.
Al cierre de esta edición, los investigadores no habían establecido fehacientemente el móvil del crimen, pero presumían que podría haberse tratado de un acto de venganza.
Sin palabras. Según fuentes allegadas a la investigación, el crimen ocurrió alrededor de las 19.30 del domingo, cuando dos estampidas secas resonaron en el cruce de Felipe Moré y Ocampo, una barriada habitada por personas de clase media en la zona oeste de la ciudad. A esa hora muchos vecinos de la cuadra seguían el partido que las selecciones de Portugal y Estados Unidos jugaban en busca de un lugar en los octavos de final del Mundial de Brasil.
Una de esas personas era una mujer de unos 50 años que vive a pocos metros de la esquina mencionada. Al oír las detonaciones, según contó ayer a este diario, se sobresaltó y entonces salió a la calle para ver qué había ocurrido. Apenas se asomó distinguió una escena estremecedora: Lucas Ezequiel Escalda estaba tirado en el pavimento en medio de dos charcos de sangre.
Al lado del muchacho baleado, su hermana Natalia Soledad N., de 23 años, gritaba en medio de sollozos. Todavía estaba aterrada por lo que había ocurrido unos minutos antes, mientras ella caminaba junto con Lucas y en esa esquina, a unos metros de las vías del ferrocarril, fueron sorprendidos por un hombre armado.
Según fuentes policiales, sin que haya habido un diálogo previo el hombre pulsó el gatillo de una pistola 11.25 y le disparó dos balazos al joven. Uno de los proyectiles le atravesó el pecho a Lucas y le perforó el lado derecho del tórax. El otro le atravesó el brazo derecho.
El muchacho se derrumbó malherido en la calle mientras Natalia, desesperada, se desgañitaba pidiendo ayuda. Entonces varios vecinos se acercaron para auxiliar a Escalda.
"Estaba tirado boca arriba y tenía convulsiones porque uno de los balazos le dio en el corazón", explicó la mujer que dialogó con un cronista de LaCapital. Poco después del violento suceso arribó un patrullero pero la ambulancia del Sies, según contó la vecina, demoró "mucho tiempo" en arribar a la escena del hecho. "La gente le pedía a los policías que lo llevaran al hospital, ellos decían que no podía hacerlo", comentó otra vecina.
Finalmente, el móvil sanitario apareció y Escalda fue llevado al Heca, pero murió en el camino. El muchacho vivía en Riobamba al 5300, en la zona oeste de la ciudad, y tenía una beba de 15 días.
Motivos. Hasta anoche, los investigadores policiales y judiciales no habían determinado en forma fehaciente la motivación del crimen, pero presumían que podría tratarse de un acto de venganza. En ese sentido, los voceros consultados indicaron que el muchacho fallecido tenía prontuario abierto por un intento de robo ocurrido en 2011.
Por su parte, el portavoz policial señaló que los médicos forenses que realizaron la autopsia encontraron un proyectil calibre 11.25 en su cuerpo. El hecho es investigado por personal de la comisaría 19ª a las órdenes del fiscal de Homicidios Miguel Moreno.
Fue apuñalado en una fiesta y se encuentra grave
Un joven de 29 años fue apuñalado en el desenlace de una discusión con dos conocidos en una casa de Pérez. El herido, Miguel Angel C., fue internado en el hospital Centenario y al cierre de esta edición su estado era grave. Hasta anoche el agresor no había sido localizado.
Una fuente policial indicó que el incidente se desató el domingo a la tarde en una casa de Uriburu y Las Palmeras, en la ciudad de Pérez. Allí se celebraba una reunión familiar cuando comenzó una discusión por cuestiones no precisadas. Al parecer, en ese contexto la esposa de Miguel Angel C. entabló un altercado con la pareja de un hombre que también participaba del encuentro.
El entredicho originó una pelea entre Miguel Angel C. y el esposo de la otra mujer. La reyerta terminó cuando el contrincante del joven herido le asestó una puñalada que le perforó el lado izquierdo del tórax.
El violento hecho es investigado por la comisaría 22ª de Pérez.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Todo lo que puedas aportar para mejorar este Blog será bienvenido. Opiniones, Historias, Fotos, etc. Puedes hacerlo también a mi e-mail: charlesfrancis1953@hotmail.com
Por todo; Gracias.-
Carlos