Confusión en la zona sur de la ciudad. La víctima tenía 28 años y habría sido asesinado en una pelea atrás del Apeadero Sur. Apareció en Buenos Aires al 5300.
El jueves a las 21 una serie de gritos y patadas en un portón de calle Buenos Aires al 5300 exaltó a los vecinos. Quien golpeaba en forma desaforada era un hombre "drogado o borracho", según dijeron, que presentaba una herida de bala en la pierna izquierda y reclamaba ayuda para quien era su sobrino. Ese muchacho minutos antes había sido abandonado en la vereda con un balazo fatal en el abdomen convirtiéndose así en la víctima 107 de los homicidios registrados en Rosario en 2014. Se llamaba José Itre, tenía 28 años y aparentemente la pelea que lo llevó a la muerte no se produjo donde fue encontrado. Los vecinos dijeron que allí no se escucharon detonaciones de armas de fuego. Y por otro lado, una serie de llamados al 911 alertó sobre una trifulca a unas 20 cuadras de allí, donde se supone que sucedió el hecho.
Si bien las primeras versiones relataban que Itre había sido víctima de un robo, las llamadas al 911 sostuvieron que alrededor de las 20, en Pago de los Arroyos al 6300, dos cuadras atrás del Apeadero Sur al que llegará el futuro tren a Capital Federal, hubo una pelea entre cuatro o cinco personas en la que no faltaron varias detonaciones de armas de fuego. Al acudir la policía a esa dirección no encontró a nadie que le supiera explicar el origen de los disparos, pero secuestraron un plomo deformado calibre 9 milímetros. Según trascendió, la trifulca se habría generado a partir del robo de un carro de cirujas que pertenecería a Itre o bien a su tío.
Un auto claro. En tanto, los vecinos y testigos del lugar donde fue hallado Itre desestimaron las versiones del robo y dijeron que frente a la dirección catastral de Buenos Aires 5341 había estacionado un Fiat Duna color claro, podría ser blanco, en el que se encontraban cuatro personas. Eso sucedió entre las 21 y las 21.05 del jueves. Maxi, un vecino que pudo ver la secuencia completa junto a su amigo Luciano expresó: "Yo volvía a mi casa y al pasar por ahí vi el Duna. Adentro eran cuatro tipos grandes, de unos 30 años, pero parecía que iban a robar el auto. Se bajaban, miraban alrededor, daban una vuelta y uno hasta se cruzó y comenzó a golpear la puerta de la escuela" secundaria Luis María Drago, contó.
Maxi destacó que "pensé que robaban y mi amigo sí pudo ver al tipo tirado. Nosotros fuimos hasta la esquina y de ahí llamamos a la policía. Les dije que estaban robando, pero no vinieron rápido. Volvimos al lugar y encontramos a este hombre tirado y al otro que gritaba y pateaba el portón", dijo en referencia al tío de Itre.
Ese hombre fue identificado como Julio S., de 37 años, quien no "podía mantenerse en pie por el alcohol", según contó otra vecina. "Escuché de pronto golpes en el portón y en la puerta de la casa. Me asomé a la vereda y vi a este hombre que estaba babeando y decía cosas que no se le entendían, como que lloraba, gritaba y decía incoherencias. No sabíamos qué hacer porque el otro muchacho estaba tirado boca abajo, al lado de un árbol y este hombre lo quería mover pero tampoco podía", dijo la vecina.
Hipótesis. En tanto, los minutos quemaban en el barrio y la policía no aparecía: "Por ahí llegó un móvil y lo dieron vuelta al que estaba tirado. Entonces vieron que tenía un tiro en el abdomen. Lo raro es que no se escuchó ninguna detonación", sostuvo la vecina.
Allí comienza a tejerse una trama de conjeturas. La que cuentan vecinos de la cuadra es que desde el Fiat Duna tiraron a este hombre a la vereda creyendo que estaban frente al Hospital Roque Sáenz Peña, ubicado en Laprida al 5300, y no frente a la Escuela Luis María Drago. En ese sentido, uno de los testigos comentó que "un muchacho vestido con ropa deportiva cruzó hasta la escuela y empezó a golpear la puerta, cosa extraña, ya que era de noche y feriado", lo que ahonda la hipótesis de que es posible que hayan confundido la escuela con el centro asistencial que se erige a la vuelta, en la misma manzana.
Otra vecina describió la escena como la vio: "Eran hombres de entre 25 y 30 años vestidos con ropa deportiva algunos y con jeans otros. Si bien estaban nerviosos ninguno gritaba, sólo el que decía a cada rato que era su sobrino. Ese estaba en jean, pero se desplomaba cada vez que quería pararse", contó.
Florentino Malaponte, el fiscal de la Unidad Especializada en Homicidios que atiende la investigación, sotuvo que los "dos hechos se complementan. Nuestra hipótesis es que la cosa empezó en Pago de Los Arroyos al 6300 y una vez allí, cuando balean tanto a José S. como a Itre, estas personas deciden ir al Hospital Roque Sánez Peña. Supongo que el auto se descompuso y quedaron ahí, ya que el hospital está a la misma altura pero por calle Laprida".
El fiscal acotó que "por ahora no se conocen antecdentes penales de Itre, aunque sí de su tío José S., quien estaba tan obnubilado que no pudimos preguntarle demasiado. Además pareciera que tiene una discapacidad o un retraso mental. Así que lo dejamos a la espera de que reaccione", aseguró Malaponte.
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